Uno no es un recipiente que absorba tantas injusticias,
a veces las cosas simplemente estallan
ante tanto cipayo dando vuelta por ahí.
Todo se confunde en la vorágine,
aquel que piensa distinto es un enemigo
al que hay que eliminar a cualquier costa.
Así van las cosas
entre la indiferencia, la inoperancia
y las ansias de poder de aquellos
que hemos elegido.
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