martes

Caída

Otoño, húmedo y melancólico,
extraño clima este
nada que anuncie la inminencia
del invierno excepto las hojas
del almanaque que se van
al igual que las de los árboles.
Poco para este cambio de color gris
al que el sol le da un poco de sus tonos,
mientras se empeña en disipar la niebla
que ya es una postal común.

Pedazo de hierro

Cientos de vehículos yendo en la dirección contraria, me dejaste plantado un primero de marzo tras el carnaval. Solo me quedé en el andén vacío, tu ausencia era más grande con el recuerdo reciente y eso de plantarnos se tornó una constante. A veces simplemente me abandonas a medio viaje y no hay aventón que me quite la nostalgia pedazo de hierro viejo de color azul.

domingo

Mazos

Excavamos, la luz de las linternas es nuestra guía
para nosotros que no conocemos ese sol que brilla
sobre los que viven arriba y esperan las joyas
que provienen de las entrañas de la tierra.

Pero aguardan en vano ya que esta vez
no recibirán nada excepto una bocanada
de humo en la cara y un portazo,
la bóveda de los enanos brilla en lo profundo
recubierta de las gemas de este mundo.

Descubrimos el recinto hace poco
los de afuera se han vuelto codiciosos
pero nada que nuestros mazos no detengan,
los mismos con los que ahora labramos
la roca mientras nuestra canción se pierde
ahí en lo profundo.

martes

Viajo

Viajo, mi tiempo discurre entre estas líneas y las de la Ruta 11. Un sendero a menudo tranquilo y otras veces borrascoso. Viajar es como escribir, saltando de un lugar a otro en éste periplo que significa estar vivos.

Cine

Corro hacia el extremo, 
los chocolates se desparraman 
en el interior de la cartera de mi madre. 
La última escena de eso que significa ir al cine.

30 años, 
otra ciudad, 
pero somos los mismos personajes de esta película. 
Mi amor, los viejos y la acústica de la sala.

Saga

Bajo los cielos del mundo exterior libra una batalla eterna. 
Una tras otra las hordas de los caídos vienen para padecer 
el destino de las estrellas al quebrarse. 
Aquí no hay sol que surja sobre los abismos, 
el día es un combate sin fin desde Saterra 
hasta el portal que conduce a la cámara del Shokan.
Sin fin pero sin manchas, en otra victoria inmaculada.