El sueño de Grok

I)

¡Los humanos, los humanos!
gritó Gurk el vigía,
con las venas hinchadas y 
la garganta seca,
el ojo, su único ojo, rojo de ira
y la mano en la lanza de hierro.

Lord Grok saltó de la cama,
saltó sobre la cola del wargo
que aulló y corrió por la barraca,
despertando a todos,
desplumando los jergones
y desparramando las armas.

Lord Grok saltó de la cama,
con la bota izquierda puesta
y la derecha en la mano,
saltó sobre el soporte de las anchas espadas
que cayeron estruendosas,
despertando a los pocos 
que dormidos quedaban.

Lord Grok saltó de la cama,
manteniendo el equilibrio, dando brazadas,
y se calzó la armadura de placas frías y duras
y la maza de guerra levantó a todos,
 haciendo tronar las trompas
y los tambores de jinetes de Kodo.

¡A la guerra, a la guerra!
gritaba lord Pierithos Grok,
buscando su wargo
que mordía la huesuda canilla
de un goblin flaco,
los grunts tomaron sus hachas,
los taurinos sus pesados mazos.

Medio dormido, medio despierto,
Lord Grok montó en el wargo
y salvó la canilla del pobre goblin flaco.
¡Pero esperen un momento!,
"si estamos en paz con los humanos"
y el fiero Cael conduce sus pasos.
No hay guerra dijo  Grok
y maldijo su sueño pesado,
y el vapor violeta del vino aún más pesado
y al loco Gurk con su ojo rojo y su lanza de hierro.
“Malditos vigías con un solo ojo
dijo Grok descorchando otra botella,
esta de vino rojo, 
abierta para brindar con el elfo
y sus aliados enanos del clan Hammerhand.

Barriles de cerveza y toneladas de carne de buey,
tinajas de vino rojo, y del violeta más pesado
se abrieron ese día.
Hic, hic, hic,
y bebió hasta el cronista.

II)

Gurk yacía colgado de cabeza
atado a un tótem, que los taurinos
levantaron en honor a Lord Yisus,
las copas se vaciaban
los enanos entonaban 
una vieja canción de guerra
y detrás los wargos le aullaban
a la luna mientras una sacerdotisa
le abría la p………..

- Espera un momento dijo el Mago Púrpura, eso es de
otra historia, no sé cómo será de donde tu vienes
pero en mi pueblo le dicen plagio a eso.
- Tú no sabes nada replicó el Mago Azul, es una adaptación
del Rey Diamante. No sabes apreciar mi nivel cultural.
- El único nivel que tienes es el del vino en la sangre,
ya te está haciendo efecto y desvarías.
- Esto no se queda así dijo el Mago Azul tomando
otra copa de Malbec que un goblin le servía mientras
esquivaba los intentos del wargo de morderlo.

Una llama brotó de la mano de Azul y todos se quedaron
sin vino, ni rojo ni violeta, la música se interrumpió y 
Grok lanzó un grito de guerra.
Los enanos se enfrascaron en una feroz batalla con los taurinos
y los orcos, los wargos perseguían a los magos, el fiel Dolafo
corría al goblin que huía con la bandeja a través del campamento.
El fiero Cael lanzaba fuego a diestra y siniestra, quemándole
las patas a los wargos y a los taurinos.
El Mago Azul contemplaba la escena sin entender nada y en eso
Púrpura le dio un golpe en la cabeza, para que saliera de su ensueño
mientras el vigía Gurk se soltaba al grito de todos contra el hechicero.

- Ahora si hay una batalla bramaba Grok rechazando a los que se querían beber el
último tonel de vino de la isla de Creta.