Otra guerra, la amenaza
resultaba ominosa pese a que el aire estaba limpio del sonar de los cañones.
Debe haber mirado a Giulia
su esposa y a los cuatro hijos: Graciela, Pierluigi, Mauro y Fiorella. Incluso
a Shusai, que le movía la cola mientras fumaba en la entrada de la casa.
Tendría que vender la moto,
en el barco no cabría y el can se quedaría despidiéndolos en la lejanía.
Así es que llegaron a
Buenos Aires, en aquella época los inmigrantes se ocupaban laburando en los
campos. Pero Gualterio se las ingenió para seguir en la ciudad.
De un momento a otro
bobinaban y vendían motores en la zona de Lanús. Luego la costa atlántica hasta
llegar al viejo Balneario Océano.
Ahí compraría una estación
de servicio, que se volvería alojamiento y lugar de reunión de los habitantes
de la zona. Allí nos conocimos un día de septiembre.
Pero es en cualquier parte,
desde hace un tiempo, en dónde te extraño Viejo Tano.
10 de Septiembre de 1915, nacimiento de Gualterio Fiori. Nuestro
Nonno.
No hay comentarios.:
Publicar un comentario