Coordenadas: 13-1313-13-2777
10/07/2022: he llegado con la noche un tanto distinto, de espíritu intacto, el portal se abrió sin resistencia. El del 2006 fue un lunes, con el nacimiento de esa alma inocente que marcará el paso de las estaciones, justo un día después del cielo azul sobre Berlín. El hechizo ha modificado el sitio aunque ciertas partes siguen intactas, resplandeciendo ante la llegada de un desconocido que no es tal. Reviven los lugares, el teléfono llama a las habitaciones que se pueblan de gritos confusos a los que acompaña la gota detrás de la cortina. He vuelto a la torre ilimitada igual que el Emperador Relámpago poniendo las figuras en su lugar, semejante a un álbum, lo que trae los recuerdos y estos se esparcen por todas partes.-
11/07/2022: la noche se llenó de sonidos familiares, puertas que se cierran raudas y precipitaciones en la ducha. La cerradura emite en su rugido magnético la queja de la llave que se quedó sin trabajo, echada a la dimensión sin entradas en su eterno sueño. Hasta el almidón se sentía familiar pero los ojos traviesos no descansaban, acomodando las piezas del rompecabezas que se borró para en una broma cruel retornar, gruesas paredes se levantan en donde apenas había muros provisorios. El frío invadió el anexo, recibiendo con ecos del pasado al solitario jinete que cuenta los escalones hasta arribar al primer piso. Sólo falta llamar para que un recuerdo le permita entrar, aguarda el teléfono colocado ahí a propósito.-
El sujeto detrás de la barra resulta familiar, al dar los primeros indicios viene a la luz su nombre. Carece de este, por ello el apodo salvador lo escuda cerca de las ocho treinta al encontrar a un náufrago de otra dimensión. Se ponen al día trayendo los nombres de aquellos que se perdieron en el horizonte, guerreros que dejaron sus energías en esta torre resplandeciente. Sabe las notas para conjurar el hechizo, interpretando sobre la azucarera de metal sobreviviente del fuego de los eones. El frío de la mañana lo recibe con el viento que corta, pero el rostro ya ha pasado por ello así que es apenas un paseo. La marca en el reloj no se modificó, podrá oír a sus compañeros bajando los peldaños a calentarse con el brebaje antes de que los lancen.-
12/07/2022: golpeó y por supuesto que lo atendieron, siendo asaltado por un montón de globos azules con letras amarillas. La no entonces reina realizaba malabares, la manipulación era una técnica que requería sacrificios y así compartía el vivaque comiendo de esa olla grupal. Javier Omar le contó una historia, que se desarrollaba en un pantano, la búsqueda del grial lo llevaría a tener que cambiarlo por una bandeja para presidiarios con las raciones definidas. Sería el ladrón en la noche, con un caldo a punto que espantaba a la sudestada acompañado por el mendrugo que no servía para adobar. Los constructores dejaban que pasara, por haberle dado forma a aquella atalaya cuyos símbolos son el rayo y el conocimiento.-
El hombre tenía el cabello de ceniza corriendo por entre mesas, sillas y saleros. El domingo llegaba uno de los asiduos a ver al equipo de moda, tirando insultos que podían llevar a la expulsión sin emular al juego en la televisión. Siempre solicitaba permiso al personaje que lo atendía en eterna vigilancia del café que nos ha de juntar otra vez. Su nombre vino en la conversación con los que quedan acá, la lista de memorias se amplía pasando por anécdotas infinitas. Toma tu lugar viejo amigo al lado de los que se te unan, el vigía de barba blanca, un coleccionista de pipas y un sujeto extremadamente amable. Cuida el sueño de los que se alejan del caos en la búsqueda de curarse la enfermedad que no abandonan.-
13/07/2022: jamás es un adiós, más bien un largo hasta luego que encierra la contradicción en las pasiones. ¿Quién te dijo que no volvieras nunca? ¿Acaso no tenía éste tu semblante? Llegaste para ser reconocido enseguida recibiendo una sonrisa, las voces serán corridas hasta que el murmullo se acalle con la cuenta convertida en cero. Tarde de la siesta, gritos de fútbol a lo lejos y el mar, en todo el recorrido está él aguardando la visita. Caen los proyectiles en señal de respeto a Alfonsina, se desgranan en las rocas pese a que se las sigue enviando a la carnicería. Splash, tu mensaje ha sido archivado para ser leído en el espejo que se forma sobre la colina con el viento trayendo el olor a sal desde el muelle que llama iluminado.-
14/07/2022: en torno a la estación los hoteles sirven de consuelo a los desarraigados, la pareja al otro lado se ha extraviado en el éxtasis. Los apuntes se amontonan tratando de hallar el método adecuado, la llave del conocimiento que le será revelado al contemplar el océano. Huye los miércoles, la esperanza le regresa al ver las luces lejanas que se esfuman entre descenso y descenso. El camino se ha embebido del aguacero, gruesos surcos en los que las semillas hídricas se plantan hasta formar un canal. El zigzag del automóvil lo arrulla, apenas nota que el piloto se ha metido de lleno en la laguna invasora, reclamando la patente que una ola le devuelve. Amanece en casa el jueves, la pesadilla quedó lejos.-
15/07/2022: los personajes se desvanecen en formas diversas, bajo el concreto de un subsuelo de estacionamiento, al darse vuelta el interlocutor que se ha quedado solo con ese momento que aún sigue candente y el vehículo que se aleja hacia otra costa. El último guardián recorre los pasillos marcando con runas las columnas, el salón se encuentra a una bandeja de distancia ocupando su lugar con los otros habitantes. Los artefactos en el cielo artificial requieren la atención de los dos sujetos, uno acompañado de la lumbre asesina haciendo equilibrio en la escalera en tanto el otro se fuga a conseguir sorber unos verdes. Apenas algún sonido emerge del ala que da a San Luis, su par perpendicular hace sonar los cañones que anuncian la independencia.-
16/07/2022: el café sabe igual siendo que en esencia su cuidador se encuentra allí, inclinado sobre la máquina vertiendo los granos a la par del paso de los segundos. Las tazas chocan al sometidas a la caricia del agua, en ocasiones le quedan las marcas que las mandan a ser apartadas de la manada. Las heridas en la superficie inmaculada se parecen a las que curten los rostros, de cada uno de los que componen la estación llamada cocina. Al cielo se accede por una escalera que surge de las profundidades, atravesando la noche hasta dar con el salón iluminado. Los manteles grises fueron reemplazados por unos granates de manera que las gotas de la alegría no se noten al caer de las copas.-
17/07/2022: retornó al pago con una obra de Gustavo repleta de rimas y leyendas. Su homónimo rioplatense le parecía el duelo justo habiéndolo acompañado, junto con otros desconocidos, durante la trayectoria de la adolescencia. Le permitía esto recordar los rostros de los que bajo el mismo sol envejecieron, hasta la tinta se tornaba pálida pese a su resistencia a salir del tubo. Grabó unas palabras yendo el ejemplar a dormir bajo el velador, con las fotografías del cuarto final de la década que mezclaban los viajes. Se volvieron todas estaciones de paso salvo la última, terminal cuyo fantasma deambula entre la estructura nueva que le rindo culto al ego de un bufón.-
La madrugada tiene sus sonidos, los vigiladores intentan no ceder al sueño que invade al resto de la humanidad, el ascensor envía sus quejidos en la forma de cuerdas tensadas a las que el aceite abandona. La guardia ocupada en arreglar los desperfectos bebe el brebaje preparado para la ocasión, los palos anuncian el naufragio así que toca regresar para que las horas no sigan congeladas. Un enorme dispositivo lo deja cambiar el agua fría convirtiéndola por alquimia en calienta entrañas, se topa con otro sonámbulo que viene con idéntico objetivo. El comienzo del desayuno anuncia que debe marcharse, las tazas chocan emulando a los vasos en la pasada noche. El sol deja llegar uno de sus rayos acariciando el rostro de Renzo rumbo a casa.-
19/07/2022: la goleada fue comentada durante el almuerzo, con el cónclave riendo para en el futuro callar con la pena desde los doce pasos. Los pasos retumbaban ante la soledad de cada curva, el mate era el otro compañero además del sonido saliendo de la pantalla. Las últimas medianoches completó el viaje de un atlante intentando salvar a su patria, tantos episodios para que únicamente quede el recuerdo en las próximas aventuras. No se quedó a ver el alargue, sabía que las posibilidades estaban en su contra así que se fue a cursar atravesando el hall lleno de preguntas. Tal vez podría adivinar en el vuelo de un ave extraviada el resultado final, sin embargo no pasó tanto hasta que Alejandro llegó para anunciarle los dos goles del final.-
20/07/2022: el partido contra los de naranja terminó en empate, intentando conocer el resultado se topó con el único potentado que tenía en su haber una pantalla. Reunidos en torno a esa señal vieron un viaje ajeno aunque sin notar que ellos estaban atravesando uno semejante. El rito los acompañaba incluso si se encontraban en la distancia, el teléfono sonaría para que se encendiera el monitor sintonizando una señal fantasma. El hombre a cargo del depósito no podía entender el fenómeno, incluso comunicando dicha situación a sus jefes con chance de ser tildado de loco. Así que terminó reunido enfrente a la visión del pasado con las energías de ellos, los que corrían por los pasillos vacíos.-
21/07/2022: en algún momento tocaría ir al fondo a descansar, pero en lugar de dirigirse al cubículo giraría a la derecha tomando el pasillo desierto. La habitación 113 estaba ocupada, fuera de esto apenas había algún que otro portazo. Las voces se apagaron paulatinamente hasta que quedó un solitario ermitaño que andaba recordando con el termo bajo el brazo. Ciertos sonidos apagados unidos a la voz del penitente surgen del umbral, la gárgola sostiene la aldaba amenazando con emular a Garm de modo que el visitante pronuncia el conjuro que desactiva el hechizo. Dentro lo espera la cena, la rutina ha sido quebrada.-
23/07/2022: regresaba en agosto, los primeros días del mes de Octaviano. La inscripción fue modificada de forma tal que no tenía que perder el tiempo con largas filas descendiendo al subsuelo, evitando también las goteras. En los cielos rojo sangre se extraviaba cuando no en esos antros que ahora se venden como paquetes individuales, acorde al bolsillo de los consumidores. A mediados del mes iniciaba la cursada, el bodrio para contarles lo rígido de un sistema de trajes y chamuyo. La esfera apartada de la realidad, la sociedad ardía pero los sujetos miraban la columna de humo que les tapaba el torreón. El sitio al que serían catapultados luego de comerse las entrañas de sus víctimas, sonriendo con soberbia.-
24/07/2022: encontró otros hermanos y maestros fuera y dentro de la torre. Entraba la tormenta cada vez que dejaba el cobijo, con pequeñas estaciones que se volvieron hogares cuando la guerra culminó. Gritos poniendo en aviso al mundo de la llegada de esas vidas, juguetes improvisados, festejos, despedida y bienvenida. El peregrinaje nunca cesa, las sonrisas te reciben al cruzar el pasillo con la jauría en torno a su Señora aguardando el retorno del que sale a picar el laburo. Con una cena al cerrar el local incluidas las copas aparte de los recuerdos acompañados de la música.-
25/07/2022: las visitas han invadido, literalmente, cada espacio sin ocupantes visibles. Desaparece el asfalto, la peatonal, la fuente verde y el nuevo paseo (luego de una detonación). De manera sincronizada tienen horarios de llegada, almuerzo, curación del calor en el lago salado y cena. Las bocinas ocupan el aire, mejor transportarse a algún lugar lejano diría el sujeto de las páginas amarillas rodeado de oyentes que no tienen el vértigo. Con el cambio de los años las conductas se potencian, no preguntan el costo o los servicios del alojamiento sino la existencia de esa conexión virtual que los incomunica. Se pierden el momento tratando de perpetuarlo en una foto velada.-
27/07/2022: imaginó balones cruzando la hache, brazos en alto, lamentos y jugadores en casilla. Un resultado abultado, ideal para la crónica del domingo luego del almuerzo suculento. El viaje en el colectivo vacío a través de la costa, los barcos que ruegan por la pesca, esos depredadores en el límite y los domadores de olas. Estaba satisfecho realmente con la jornada, escribiría la nota para que fuera publicada en la semana entrante. Algo de pronto lo obligó a abrir los ojos siendo observado por los dos tipos que habían logrado sacarlo del sueño, llovía copiosamente afuera aparte de ser muy tarde para almorzar, tomar el bondi y cubrir el partido. Así que tendría que pedir datos por teléfono, después de todo no se sacaron ventaja y fue un empate 16 a 16.-
30/07/2022: hay algo de magia en la frescura del sábado primaveral, la música emerge tras el desayuno a la vez que el mate inicia su concierto. Las huestes esperan, con tres alcanza para llamarlas así, ahí cerca del centro a eso de las dos de la tarde. No hay mensaje salvo el recordatorio de la semana anterior, atraídos por una fuerza invisible los guerreros llegan al punto del encuentro. Habrá otros en idéntica conducta ataviados apenas con un teclado y un ratón para desatar el caos en la pantalla. No hay una ventana repleta de accesorios con una leyenda que invita a incluir a todos, únicamente la costumbre de juntarse desapareciendo del mundo por un rato.-
01/08/2022: un par de lapiceras, marcadores y el cuaderno para tomar las notas que no conducían a nada. El olor de lo nuevo a mediados de marzo al pasar por la librería en una esquina, la repetición de las lecciones usando los márgenes para crear historias que lo seguirían como una nueva sombra. Los escapes cuando el orador aburría a la humanidad desde atrás del disfraz de payaso al servicio del sistema que falla sin acertar una maldita vez. Los corredores silenciosos interrumpidos por su escape a la noche desapareciendo antes de que se percaten, con el estandarte del traidor en el pecho volando sobre la destrucción.-
02/08/2022: antes de que llegara a decir hola lo privaron de la encomienda que portaba, iniciando el banquete al que se autoinvitaron. Los chorizos caseros acompañaban a la morcilla vasca, los grisines y los pequeños manjares de chocolate y coco. Las muecas eran las de una banda de deglutidores que tras atracarse comenzaban a separarse dejando a los cuatro jinetes a solas. A Valenciano le guardaron su parte del botín una vez que el gigante puso el grito en el cielo al contemplar la bacanal. A la degustación de la medianoche siguió el brebaje para facilitar el descenso, no sin antes asegurarse que no hubiese una de esas trampas efervescentes que tanto les agradaban a los otros tres. Sino la venganza sería terrible acorde al Ángel Gris.-
06/08/2022: en casa aguardaba el can de color fuego con su par anaranjado, de menor tamaño y procedencia. Era el obsequio final de su abuelo ya viajero de las estrellas, sumando canas al pelaje rojo. El astro se apagó dejándole el lugar a uno venido del lado oscuro de la luna, con notas de café que les recordó a los dos inmigrantes aquello que tuvieron que abandonar. Por la mañana escalaba la pila de escombros aguardando al visitante que con toda la experiencia soportaba las embestidas del joven guardián. Más tarde siguió su rastro de Prometeo ayudándolo en la caza de cometas, espectáculo que los ojos de la miel contemplaron.-
14/08/2022: sentado en el fondo del colectivo se apretuja la campera gastada, costumbre repetida en cada frenada por parte de Manolo. Cambia la nave aunque se mantiene el hábito, miles de líneas en el asfalto pasan al moverse entre su casa y la tierra que lo arropa. La estación renace con sus puestos, boleterías y murciélagos coexistiendo con las palomas, vengativos los primeros en comparación con aquellas que profesan la paz. Descendiendo los escalones para dejar a un lado el edificio que ahora está vedado, el ego se metió hasta los huesos trayendo un coro de lacayos que lo mantiene en las alturas. Ya de ahí no salen los transportes para vagabundos, es necesario demostrar la pertenencia al círculo de esplendores.-
21/08/2022: estando enfermos alguien cuidaba nuestro sueño, colocando paños fríos para ver si el infierno se escapaba del cuerpo atormentado. La soledad sin embargo hizo añorar aquel momento perdido, las voces se fueron aquietando en el reino del silencio y los años gastados. Encontraría a un cazador en los episodios de fiebre, con el feriado torturándolo hasta que el domingo lo liberó y pudo marchar con los demás. La lluvia había hecho su trabajo quedando como metáfora, con la tierra soltando su fragancia renovada y los vehículos levantando luciérnagas hídricas. La mañana lo esperaba viendo por la puerta de metal a los proyectiles pegar sobre el patio que sirvió de tendedero y campo para perseguir el balón.-
22/08/2022: las dos temporadas fueron para matar los malos tragos, apoyado en un árbol que sigue allí así como las historia fantásticas que devoraba una tras otra. Tornó a casa con la idea de crear algo que perdurara, las pinturas rupestres devenidas en letras que invadieron el ciberespacio. Dejaron sus marcas en los espacios del papel, entre mensajes que no decían nada y boletas de los eternos en el poder. Fueron himnos, odas, prosa tornada poesía, sensaciones materializadas en un viejo ordenador que presenció el nacimiento. Arrastró con su equipaje los escritos, sin importar que el mundo se volviera diferente exigiéndole otro rol.-
23/08/2022: los chocolates pasaron la factura el lunes por la mañana, teniendo que aguantarse hasta el final de la semana para ir en pos de una aventura. Canjeó algunas obras maestras por su amor nuevo, un pequeño grupo libraba una batalla desigual contra aquel que sólo tiene la facultad de destruir. Sus creaciones son fugaces, intentan tomar la esencia del fuego que yace fuera de su alcance. Con promesas vacías ha conseguido incautos que nutren sus huestes, sin darle importancia a las cosas pequeñas. De ahí su perdición, convertido en polvo al empezar la primavera que seca las lágrimas del desamor contemplando a una nueva partida comenzar. La costumbre se ha instalado para ser una pieza de la historia sin fin.-
24/08/2022: encontraría a su interlocutor sentado en una vereda, deteniéndose a hablar sobre un tema en especial que ya los reunió en el pasado. Otrora bajo una luna en la que la sombra del pequeño can perseguía la estela de un cometa. Y cuándo no al dar la vuelta en una esquina, el asunto dejaría de ser una coincidencia años más adelante. Los ravioles se quitarían una parte de la harina que naufragaría, la marea blanca se vertería en platos fríos en tanto los dos personajes veían un mural sin terminar con la escena de una batalla. Formarían parte de él, sus estrategias los juntarían a debatir en la calle ignorando a los demás que creían eran unos locos por no seguir la marcha a ninguna parte.-
25/08/2022: la isla desapareció rápido dada la experiencia que se reunía de un lado de la mesa, enfrente en cambio empieza a colapsar la montaña repleta de obleas equivalentes a remos sin uso. Tras el almuerzo vendrían las contiendas abandonando a su colega que se marchó con el presente, lo había hallado en una tienda de cuyos rincones surgían rayos y centellas. Aun así se introdujo en aquella mazmorra para retornar al mundo mortal por otra entrada, la vieja sala de recreación reunía a varios viciosos justo en dicho punto. El día último del mes de la primavera amaneció con ella en su esplendor, saliendo temprano para el cónclave en el centro de la ciudad a la que se negaba a abandonar aunque debería.-
27/08/2022: le pareció que su compañero de cuarto había entrado, pero la madrugada lo confunde a uno creyendo que el tiempo no pasa. Lo convencería que algo no iba bien a juzgar por la luz del pasillo encendida, aunque demoró en llamarlo. Nada, silencio como respuesta, se giró para seguir con el sueño que le tironeaba los ojos creyendo haberlo oído pero sin decidirse a lidiar con el hecho. —¿Qué? Ahora sí se levantó hallando los despojos que la noche le traía, tornando a un ser de carne y hueso que dormía la mona del veintiuno de septiembre apenas interrumpido el rito por los tres desgraciados que lo sacaron para almorzar. Las ojeras se desvanecerían, a excepción del futuro en él que debe velar por dos almas pequeñas.-
03/09/2022: la llegada de la estación perfecta se anuncia con los brotes en cada cuadra, además de las alergias del caso. Brilla el océano dado que no quiere ser menos que la fuente, al sol le toca hacer relucir a la ciudad una vez que la lluvia matutina se ha retirado. Los ojos jóvenes registran cada detalle pese a los intentos de sabotaje que vienen desde arriba, entornando los faroles al asentar la crónica. La librería aguarda que las naves sean desprendidas, su carga contiene el tiempo de millones de eternautas describiendo a la civilización y épocas que llegan a nosotros en el festival de las letras, una afortunada se va bajo el brazo con las llamas de fondo en los anaqueles.-
05/09/2022: Orión descansa viendo desde atrás de la vidriera al mundo que apurado va, se encuentra en expansión así que su vigía cambia el monitor sobre el que yace. Dos sujetos buscan un software cuando no un ratón, pero no ve la necesidad de perseguir a su cena pese a tenerlo al alcance de sus garras. Al irse las luces observa al cielo que se despeja en un retazo, para los demás sigue siendo una cortina gris eclipsadas las estrellas por las luces artificiales. Dichoso él que puede contactarse con el espacio al que regresa al dormir la ciudad, tornado en constelación para darle un abrazo al cosmos en donde cumple su sueño de ser gigante.-
06/09/2022: deambuló por una ciudad vacía repleta de personas a las que desconocía, entre construcciones que cambiaban de forma en una suerte de laberinto que mutaba para confundirlo. Las luces artificiales seguían fallando en alumbrar los rincones apartados del mundo, estaba en el medio de la mañana creada por los faroles pero los rostros conocidos se evaporaron dejándolo solo. El náufrago encontró de pronto a otros en esa isla que era su mente aislada de la humanidad, ambos se movían en una escena de color haciendo a un lado la oscuridad. Los lazos se fortalecieron en medio del vendaval, viniendo hasta estos días con un montón de imágenes destilando felicidad.-
10/09/2022: el cumpleaños de la última primavera en secundaria arrancó con una curda, extraviados como turca en la neblina nos fuimos a perseguir un faro desconociendo a la reina de dicho pago justo ahí donde el mar hace una curva sobre la playa. La nave amarilla nos dejó de a pie, dos héroes regresaron en busca del muleto llamado Potopló. Busqué a mi compañero de copas encontrando el oleaje, tras un quejido proveniente del continente lo hallé rindiéndole tributo al Barba desparramado sobre la arena. El día sirvió para seguir con el festejo, dado el feriado, recostados sobre escombros del fondo de casa para tomar la fotografía final.-
22/09/2022: los pedazos de novela se encontraban en diferentes locaciones, un puñado de copias que suplían a la obra original dando a conocer el mensaje para protesta de los editores que no recibirían su parte. El autor sería inmortalizado en cada una de las páginas, bajo la forma de un jugador que entonaría en la derrota el himno de su escuadra buscando la luz entre la oscuridad de la marea que los atacaba. Valenciano se había retirado pero en el ordenador, él único que revestía tal condición, estaba la historia escrita que encontraría un lector prontamente. La ventana entreabierta dejaba pasar al músico eterno, que se dedicaba a leer pasando las hojas rápido hasta que alguno le echaba peso al texto para que no se moviera.-
El gallego, con perdón del argentinismo, había sido jugador en su juventud no pudiendo abandonar nunca el campo verde de la gloria, la alegría y las tristezas (insultos incluidos). Sus comienzos como técnico fueron modestos, precisamente en el FC Modestia Aparte, siendo el portero del club (no el que atajaba), barrendero, despachante de tragos, panchos y cafés, personal de seguridad, preparador físico, psicólogo y enólogo (aunque no se quedaba en probar nada más). Boina blanca en honor a la escuadra de sus amores, confundido ello con la afiliación a cierta agrupación ante el desconocimiento, alpargatas, pañuelo rojo sangre, bombachas y saquito de lana en tono celeste o azul. Fue el artífice del ascenso, caída, resurrección, primeros auxilios, RCP, fundición, refundición y cambio de nombre de la entidad. Al final tantas funciones le pasaron factura, sacramento, bizcochos y escones, teniendo que aceptar la inminencia del retiro para él que era una eminencia. Estaba recogiendo sus pertenencias cuando le llegó una misiva, entregada al portero que se la pasó al barrendero, tras ello al preparador físico y al enólogo que la leyó al revés mientras escribía la nota de un buen malbec: “Taninos que tañen como las campanas de los querubines, pero sin el sonar del badajo que se ha ido al carajo. En boca sabe a fruta, a cosmos insondable, estrellas en el cielo y aquí también por haberle dado a la pata de la silla con el pie descalzo. ¿Qué es esto, una carta? ¿Desde cuándo me dicen qué debo poner en mis informes? Vade retro engendro maléfico, al cesto contigo con los corchos que este océano ha de bajar al garguero y de ahí al corazón”. Dicho lo cual tiró la esquela al canasto, que era un esqueleto en sí, siendo salvada la misma al ser encontrada por el portero que esta vez la leyó para que el DT se entere de la oportunidad de su vida. El Lobo peleaba el descenso sin haber cosechado puntos en las primeras fechas, la necesidad era evidente ante el correr de las semanas queriendo llegar a las fiestas sin las cargadas de la ocasión. Encima San Nicolás tenía los colores de la contra, codeándose con los poderosos siderales ante las puteadas de los Triperos.-
No tuvo dudas, tal vez un poco al principio pero los demás no lo saben salvo por usted lector que no se lo va a contar a nadie, y así fue como terminó aceptando en contra de su voluntad aquel obsequio maravilloso. Lo recibieron con bombos y platillos, tras el 0 a 3 se los arrojaron acordándose del árbol genealógico del entrenador que se quedaría cavilando con las luces apagadas sobre los nombres de sus abuelas, tías, hermanas, hermanastras y madrinas, no encontrando a ninguna que se llamara Recontra. Se percató del silencio, ¿a dónde habían ido todos?, ¿por qué irse sin decirle a dónde? Tanteando las penumbras se pegó flor de hostia siendo hallado por sus dirigidos a la mañana siguiente con lo que se creó la leyenda sobre su fidelidad y la hinchada lo amó aún más, olvidando esto enseguida al recibir un gol en contra. El técnico puso toda la carne al asador, aprovechando la volada para subir el precio de la bondiolita y el choripán, pagados sin chistar por los concurrentes que después de tanto trabajo se habían cansado. Ser hincha no es fácil, se pone empeño en estar ahí a cada momento (aunque acá eran derrotas nada más) sin que absolutamente nada incida en dicha profesión que ha reemplazado incluso a religiones ante la devoción por los ídolos que son todos enviados de un ser superior. Paseando sus rostros en la procesión semanal, que no sabe de horarios y ocupaciones.-
Dos derrotas más, los comentarios desde la tribuna no mejoraban, así que el entrenador se dio cuenta de que requería una estrategia nueva no pudiendo tirar a la basura a todo el equipo que la verdad se empeñaba en seguir último. Estaban cómodos, eso sí, hasta en la tabla de los promedios que él se negaba a mirar dado que tenía en claro el panorama aunque fuera corto de vista. Cambió al arquero, el otro se la pasaba enviando mensajes así que no era difícil anotarle. Puso cuatro defensores, ya le parecía raro que sus dirigidos se negaran a jugar quedándose en el banco sin entrar a la gresca. Completado el mediocampo y la delantera lograron marcar un gol, sorprendiendo a propios (¿qué, podemos hacer eso nosotros también?) y a extraños (¿nos hicieron un gol, cómo carajo pasó?) y a propios de nuevo (el hincha no sabía de qué manera reaccionar, el técnico menos, los dirigentes se enteraron en el resumen de la noche). El segundo tanto no fue nada del otro mundo, alguno en la tribuna se acordó de los bombos y en masa fueron a buscarlos siendo recibidos por la policía que creyó se trataba del final del juego no dejando que volvieran. El hincha más viejo del club dormitaba en uno de los escalones, entornando los ojos, creyendo que la pesadilla continuaba al no poder apreciar con claridad el tablero que reflejaba cual faro esperanzador el 3 a 0 final. Primera victoria, ¿qué es eso?-
Amaneció sombrío el día del clásico, silencio en las diagonales, paralelas y perpendiculares, hasta que el rugido destruyó el silencio (redundante pero efectivo). No alcanzaron a juntar sus pertenencias dado que la turba iracunda los perseguía por el bosque, unidos por única vez Pinchas y Triperos ante un objetivo común: la colección de troncos que rodaba buscando la salvación en el río. No pudieron volver a entrenar con calma, debían sortear conos, hinchas y encendedores al quedarse el perseguidor sin aliento. Jugaron de local a puertas cerradas, con ellos descansando en el estacionamiento y las tribunas repletas de espectadores que compartían el almuerzo en tanto los oponentes de la fecha marcaban el centésimo tanto recibiendo una placa que conmemoraba el récord alcanzado. Dado que el plan no resultó lo cambió, presentando un equipo alternativo que confundió a los rivales. El árbitro le informó que las tres líneas de cinco eran un disparate, logrando que el contrincante juegue con siete y ante la primera roja del partido se ganó por default. La liga intervino, en la siguiente fecha eran 11 contra 11 y nada de seguir haciendo innovaciones. Un gol a la salida de un tiro de esquina les dio la ventaja, el juez les explicó qué era, lateralizando de ahí en más hasta que se cumplió el tiempo de juego. Tres cambios, sin que saliera nadie, permitieron asegurar la victoria ante las protestas visitantes.-
Seguía sombrío, pese al sol en otras partes, los fanáticos los perseguían para así hacer más ameno el entrenamiento en un baldío. Las lesiones se hacían sentir, las reservas se agotaban, las rojas abundaban siendo reducidos a un grupo que no sumaba once. En la lista de concentrados apareció una novedad, un juvenil llamado Tino Madera que fue asociado al director técnico como familiar dado el nombre idéntico. Los comentarios fueron despiadados, no contento con la marcha del conjunto ahora metía a un allegado a disputar el match de la supervivencia. ¿Qué será luego, la propiedad del club, su presidencia? Pero nada de ello, al saltar al campo de juego evitando a los simpatizantes, dirigentes iracundos, cámaras, celulares, planchas y otros artículos de hogar, la verdad salió a la luz (a la sombra ya que el sol se rajó un mes atrás). El entrenador vestía la diez, no era un joven sino el viejo guerrero entre los once. Ahora el abucheo era en otro sentido, ¿qué hace el abuelo, debería estar retirado, cómo es posible que juegue, para eso entro yo? Nada de esto lo afectaba, no tenían suplentes, tampoco titulares a excepción de los encabezados deportivos. Pitó el colegiado, tomó el esférico el improvisado armador evadiendo a dos oponentes. Lo derribaron, salió rengueando pero regresó bastón en mano, un par de correctivos por aquí, otros tantos por allá. La boina inseparable cual batarang en la cara del portero y gol del menos pensado, el árbitro convalidó la jugada recibiendo las recriminaciones de los visitantes. Sacaron del medio comenzando con el toqueteo infernal, Tino veía el balón pasar, sus compañeros ni lo registraban, el arquero se hacía visera con la mano y en eso el llamado visceral lo obligó a salir. El viejo improvisó, total también podía atajar a esta altura teniendo al público al borde de un ataque masivo de corazón. El arco era inmenso, la boina blanca refulgía llamando al astro que seguía sin ganas de asomarse para ver el mundo. Pero algo venía a responder el pedido de auxilio, los dirigidos por el ahora cancerbero revoleaban la pelota bien lejos aunque esta se empeñaba en volver. De la nada comenzaron a llover proyectiles, los asistentes sacaron el equipo compuesto de paraguas, piraguas y enaguas. El campo lucía recubierto de guijarros, distracción mediante el técnico ahora vuelto mediocampista le pegó un biandazo al balón decretando el 2 a 0. El portero rival protestó, sus compañeros refugiados debajo del banco de los visitantes corearon los insultos y el juez empezó a echar contrarios. Cesó la lluvia de piedras pero comenzó la de cenizas, los uniformes se tornaron de un único tono, las líneas blancas y el terreno de juego en un paisaje unicolor. Luego el silencio, parecía que una nave espacial bajaba al centro del espectáculo para premiar a los ganadores. El sol asomó un rayo iluminando a la mole de granito, el inmenso piedrazo del universo que hizo añicos el lugar no dejando rastros de aquella contienda. Pasados los eones el Río de la Plata ocupó el hueco, pero en una pila de escombros flamea aún la bandera blanca y azul de un legendario jugador que tras zafar de la hecatombe se retiró. Ya no hubo más batallas ni equipos enfrentados, rugen las olas en la escollera de lo que fue anunciando, que dicho golpe no será el último para que los humanos no se confíen.-
Epílogo
Javier Omar ha inspirado mis historias como una especie de gran cuentista, con ideas que surgieron en una época alocada a través de la niebla que le sirve de manto a la ciudad. Sus calles, plazas, playas, edificios demolidos y nuevos, fuentes, nos han generado ideas incentivando la escritura. Esta es un barco en la esquina de Luro y 9 de Julio que decidió hacerse a la mar, bajando la costanera que contenía una réplica de un caballo rojo rampante para juntos saludar al muelle en el que un viejo guardavidas otea el horizonte buscando al único en la historia de la humanidad que violó la regla de no saltar desde allí. Puede que en este momento lo tenga a mi lado, será mejor que vea.-